domingo, 7 de octubre de 2007

ORIHUELA. LA MUELA



Este fin de semana hemos realizado una mini-ruta en Orihuela, disfrutando del PR 59 (sendero de pequeño recorrido) ascendimos a la cruz de La Muela, una de las rutas más conocidas por los oriolanos. La ruta la llevamos a cabo; un servidor, Fernando, y varios compis de trabajo, Pablo, Jose y Pedro, compañero de departamento, que es quien actuó de guía en esta salida.
Desde la N 340, dirección Orihuela, llegamos al Rincón de Bonanza y a la altura de la sala Mónaco tomamos una carretera que lo bordea en dirección a la sierra. No obstante, las alternativas para llevar a cabo la ascensión son múltiples, otra opción puede ser iniciar el ascenso desde la urbanización Monte Pinar.
Tras ascender por una urbanización, a unos 300m, se divisa un pino aislado, perfecto para aparcar el coche, desde donde nosotros iniciamos el recorrido. La señalización de los senderos es buena, por lo que no tiene perdida. Junto a los coches, a pocos metros, se observa un camino, que entre pinos, que nos alejaba de la urbanización. En este pinar nos encontramos con un grupo de escalada que como nosotros pretendían echar la mañana, aunque liberando algo más de adrenalina que nosotros.
El PR 59 asciende suavemente al principio, pero de pronto, comenzamos una ascensión de bastante pendiente, que en algunos tramos requiere alguna que otra trepada, pero nada peligrosas. Rápidamente comenzamos a tener unas vistas preciosas de la Vega Baja. Continuamos ascendiendo por el sendero, siempre siguiendo las indicaciones de dirección hacia La Muela.
Tras superar un pequeño desfiladero llegamos a un precioso paso natural conocido como el paso del Gafo, un buen lugar para hidratarse y tomar aire. Desde aquí solo queda una pequeña trepada para poder divisar la cara norte de la sierra, desde donde se divisa la Matanza, Benferrri, Abanilla...
A partir de este momento el terreno suaviza bastante hasta llegar a la cruz de La Muela, 464m. Tras de 1h 30´de recorrido llegamos a nuestro objetivo, vale la pena el paseo. Las vistas hacia el sur nos permiten contemplar toda la vega baja, la huerta de Murcia, el palmeral de Orihuela, el río Segura, hasta podemos ver el mar al fondo. Un lugar perfecto para deleitarse con las vistas y con un buen bocata.
Desde la cumbre iniciamos el descenso por el mismo recorrido, pero en esta ocasión a la altura de la primera bifurcación del sendero tomamos la variante I hacia la casa forestal, está perfectamente señalizado.
El descenso es rápido por esta variante, las rodillas sufren un poco, pero no dura mucho. Durante el descenso pudimos contemplar la escalada del grupo que nos habíamos cruzado al iniciar el recorrido. Tras una hora escasa estábamos de nuevo en los coches. La jornada la completamos espectacularmente con una invitación que Jose nos brindó en su barraca de Benferri. Junto a sus padres y otros amigos comimos y bebimos muy agusto, no pudimos ser mejor tratados, gracias por todo familia.

La semana que viene más.

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