domingo, 31 de enero de 2010

SIERRA ESPUÑA. VALLE DE LEIVA.



Esta ruta la llevamos a cabo el pasado viernes 29 de enero, aprovechando la fiesta del patrón, San José de Calasanz. Nos decantamos por Sierra Espuña sin tener previsto un destino claro, pues el día antes estabamos barajando la posibilidad de salir en bicicleta, pero ante la duda, siempre Sierra Espuña.
Nada más levantarme salí al balcón a ver que tiempo hacía, a lo lejos se divisaba el blanco sobre las cumbres de mi querida Espuña. Ya no había duda posible, la decisión sobre nuestro destino se había resuelto en un instante.
A las 9:30H comenzabamos la ruta en el área recreativa de la Perdiz, mismo iniciode la ruta anterior. La ruta es circular y algo durilla, sobre todo en el comienzo del primer ascenso a la cuerda de las paredes de Leiva, ya que no hay sendero definido y el desnivel es importante. Desde el aparcamiento del área recreativa de la Perdiz tomamos el camino que va al Valle de Leiva, no tiene perdida, y a continuación cogemos la Senda de los Dinosaurios perfectamente indicada a través de un panel informativo. Después de 1Km más o menos, y tras cruzar el puente colgante, llegamos a la pista forestal del Valle de Leiva, la cogemos en sentido ascendente hacia la izquierda, y a unos 500m tomamos otra pista a la derecha, que es la que nos lleva en dirección al Berro y que coincide con el GR 252. Otra alternativa para esta ruta es iniciarla desde el Berro.
Continuamos la ruta por el camino que nos lleva en dirección al Berro hasta que a nuestra izquierda vemos una casa solitaria perfectamente cuidada y rehabilitada. Desde la parte de atrás de la casa comenzamos el ascenso a la Cuerda del Estepar, una subidita un tanto dura y dificultosa, en la que deberemos ir buscando entre matorrales los pasos utilizados por los animales. Una vez arriba, tras 1h más o menos de ascenso, las vistas son espectaculares tanto del Valle de Leiva como del Morrón Chico y de la Morra de las Moscas. Ahora sólo nos queda continuar por encima de la Paredes de Leiva teniendo precaución en los cortados hasta llegar al descenso del Portillo, un paso natural en forma de "U" que permite descender al valle de Leiva y que reduciría significativamente nuestra ruta. Otra alternativa, en sentido inverso, es ascender todo al valle por la pista forestal hasta el Collado Blanco, para a continuación remontar hacia la derecha hasta la Morra de Juan Alonso y Paredes de Leiva hasta llegar al Portillo y descenderlo de vuelta. Pero mucho cuidadín si optáis en algún momento por descender el Portillo, sólo para montañeros colegas.
Bueno, volviendo a la ruta, esta parte del recorrido es espectacular y nada compleja, pero hay que tener precaución con el terreno pues está muy erosionado. Tras superar la Morra de las Cucalas, la Morra del Portillo(1.212m), la Morra de los Picachos, la Morra de la Carrasca y la Morra de las Bojas(1.289m) llegamos a la Morra de Juan Alonso final de la cuerda de las Paredes de Leiva. Esta ruta siempre la recordaremos porque a Pedro se le hacía tarde para recoger a su Pedrito, y realizó un descenso antes de llegar a la Morra de las Bojas "pa haberse matao", pero a ver quien le convencía de lo contrario. En este punto comenzamos el descenso hacia el Valle, pero primero debemos atravesar la valla del parque. El descenso nos llevará hasta el Collado Blanco, desde donde nos podemos asomar a Prado Mayor. Comenzamos a descender por el camino forestal del Valle de Leiva hasta que llegamos al cruce de la Senda de los Dinosaurios en dirección a la Perdiz, nuestro punto de partida. Tras unas 4 horas de ruta, sin parar, salvo para retomar el aliento y beber agua, habíamos concluido nuestro recorrido, lo cual se merecía unas birras muy frías en la Perdiz.

Ver Paredes de Leiva en un mapa más grande

domingo, 17 de enero de 2010

SIERRA ESPUÑA. MORRÓN CHICO.


La ruta que hemos llevado a cabo, este sábado pasado, un servidor y mi colegui Fernando es una de los recorridos más clásicos de Sierra Espuña, probablemente el entorno natural más visitado por los murcianos. No obstante, este recorrido puede realizarse también en sentido inverso siendo de esta manera algo menos duro.
Es una ruta muy completa en todos los sentidos, por su gran belleza paisajística, botánica y faunística, pero un pelín exigente, por lo que sólo la recomiendo para gente iniciada en esto de la montaña.
La comenzamos a eso de las 9:30H en el aparcamiento del bar de la Perdiz desde donde tomamos el camino que va al Valle de Leiva, no tiene perdida, desde el bar vamos descendiendo en dirección a las cocinas, y a continuación tomamos la Senda de los Dinosaurios perfectamente indicada a través de en un panel informativo. A unos 300m aparece un claro desde el que se divisa toda la cara este del Morrón Chico o Morrón de Alhama, en este punto debemos estar atentos para detectar el cortafuegos por el que vamos a comenzar un duro ascenso de unos 45´ que nos llevará desde los 800m de altitud a los 1200m aproximadamente.
Después del primer calentón el recorrido se hace bastante más llevadero, la senda nos lleva a media ladera por la vertiente norte del Morrón Chico desde donde tenemos unas vistas espectaculares de las paredes de Leiva y de los escaladores que disfrutan de sus numerosas vías de escalada. El siguiente punto a tener a en cuenta es la impresionante Senda del Caracol una senda en zig zag llevada a cabo para facilitar los trabajos de repoblación dirigidos por Ricardo Codroníu. Continuamos a media ladera hasta que giramos a la izquierda adentrándonos hacia el interior del macizo rocoso del Morrón Chico o Morrrón de Alhama. A medida que avanzamos por la senda observamos a la izquierda una caseta en lo alto del Morrón de Alhama, es ahí a donde nos dirigimos. Tras sortear un pequeño obstáculo rocoso que requiere un fácil trepada y después de dos horas de recorrido llegamos a la cumbre del Morrón Chico (1.444m) en donde hay una garita en ruinas y un vértice geodésico desde donde podemos contemplar gran parte de la región y en el que nos zampamos un merecido bocata y unas tortas de pascua insuperables, hechas por la madre de Fernando, de las de antes, de las que no se echan a perder al día siguiente de comprarlas.
Para continuar nuestro recorrido debemos retroceder para descender de nuevo el escalón rocoso y coger la senda a la izquierda en dirección al Llano de las Tres Carrascas y la Morra de las Moscas que es el alto que se ve al fondo, no tiene perdida pues el recorrido en este punto está perfectamente señalizado por hitos de piedra. A medida que nos acercamos al alto de la Morra de las Moscas (1.502m) aparece ante nosotros la imagen del Morrón de Alhama y su base militar EVA 13. Una vez hemos llegado a la cumbre de la Morra de las Moscas nos ponemos mirando hacia el Morrón de Espuña y descendemos por el sendero hacia una zona de pinos que nos lleva en dirección a los pozos de la nieve de Cartagena que se ven al fondo, pero nosotros antes de llegar al aparcamiento del Collado Mangueta, giramos a la derecha hasta alcanzar una puerta de hierro que da acceso a la pista forestal que nos lleva a los pozos de la nieve de Murcia. Una vez en los pozos de Murcia, cada vez en peor estado, nos dirigimos por el camino hasta el último pozo, cogemos una senda a la izquierda, que baja hacia un barranco cubierto de pinos y nos deja delante de una zona rocosa descubierta de arbolado. Tras descender por esta zona rocosa cruzamos el barranco a la derecha y la seguimos la senda hacia el Norte, remontamos diagonalmente la loma rocosa que tenemos en frente y que nos asoma a las ruinas de una vieja construcción. Un poco más adelante aparece el camino que va del Collado Blanco a Leiva. Desde este punto podemos disfrutar de las vistas de Prado Mayor, si quisiéramos agua fresca es posible descender por el camino hasta la Fuente Blanca, más o menos 1Km. Nosotros, en esta ocasión al acceder al camino, en el Collado Blanco, giramos a la derecha en dirección a Leiva. Llevamos unas 4h de ruta incluyendo el bocata y los paradas oportunas. A partir de este momento la vuelta es muy sencilla a través de una amplia pista forestal, aunque si lo deseamos podemos coger las diferentes sendas que hay paralelas al camino. El camino es todo de descenso durante unos 4Km, a los 3,5km aparece a la izquierda la pista forestal que va hacia el Berro, coincide con el GR 252, pero nosotros continuamos unos 500m hasta que aparece a la derecha el cartel indicador de la Senda de los Dinosaurios, a partir del cruce sólo nos queda 1km para llegar de nuevo a la Perdiz, cruzamos el puente colgante y en pocos minutos estamos en el área recreativa de la Perdiz. Tras 4h 30´estábamos de nuevo en el punto de partida de esta ruta circular. De todas maneras hay algo de trampa en el tiempo invertido pues los últimos 5km desde el Collado Blanco los realizamos corriendo. En total unas 5H de ruta pero su belleza lo vale, especialmente si lo que deseamos es hacer disfrutar nuestro cinco sentidos, pues además del olfato, oido, vista, y tacto, el gusto también es posible deleitarlo haciendo una parada en el bar la Perdiz donde os recomiendo el embutido de caza y sus litros de cerveza muy frios, abren todos los días menos los miercoles y los jueves, aunque también podemos parar en la Venta del Hilo.



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